El llamado reloj biológico ejerce una gran presión para quedar embarazada sobre muchas mujeres que sienten el efecto del paso del tiempo con angustia. Ser madre es un deseo que no es inherente al hecho de ser mujer; es decir, no todas las chicas quieren tener un hijo. Sin embargo, muchas de ellas, sí dan este paso en algún momento.
En general, se trata de un paso que dan al haber encontrado una pareja estable. Tener un hijo no sólo es un deseo bonito sino también una gran responsabilidad. Por tanto, antes de dar ese paso, es más que necesario que reflexiones sobre si estás preparada o no para convertirte en madre:
Cuestiones a tener en cuenta para saber si estás preparada para ser madre
1. El dinero no da la felicidad. Sin embargo, sí es verdad que se necesita un entorno económico favorable para poder hacer frente a los gastos que se derivan de la maternidad. Sumar un nuevo miembro a la familia también repercute de una forma evidente en la economía doméstica: ropa, pañales, productos de higiene, alimentación, complementos, decoración de la habitación... son sólo algunos de los gastos que se presentan en esa etapa. Por tanto, es recomendable que al menos él o ella tenga un empleo estable para poder llegar a final de mes de una forma tranquila.
2. Por otra parte, a la hora de ser madre, tampoco tienes que tener en cuenta si la gran mayoría de tus amigas ya han dado ese paso. Cada persona tiene su vida y su camino, por tanto, no fuerces tu destino por pura inercia. Vivir con autenticidad implica asumir decisiones de una forma consciente, responsable y plena.
3. Si tu relación de pareja no es fuerte y sólida, no es una buena idea tener un hijo ahora. Algunas parejas creen que tener un bebé es una solución a una etapa de crisis. En general, si una historia va mal, empeora después de la llegada del bebé. Además, un niño necesita un entorno de estabilidad emocional, afecto y amor para crecer.
4. Tener un hijo es mucho más que un deseo. Es decir, es un acto de amor incondicional que transforma tu presente a lo largo de toda la vida. El amor que siente cualquier madre por su hijo es inmenso, de esta forma, se trata del cariño más generoso que existe. ¿Estás preparada para renunciar a muchas cosas y convertir a tu bebé en tu prioridad y en el centro de tu mundo? Responde a esta pregunta con sinceridad y no te engañes.
5. Escucha tu instinto maternal. Existen chicas que tienen muy desarrollado el deseo de tener un hijo desde temprana edad. Sin embargo, otras experimentan la llamada de la maternidad a partir de los treinta años. Puedes escribir en un diario tus pensamientos más profundos sobre los motivos por los que te gustaría ser madre en un futuro próximo. Estás preparada para dar ese paso si al imaginar tu futuro junto al bebé sientes alegría y fuerza. Por el contrario, si crees que ese paso te desborda y te produce una ansiedad extrema que te paraliza, es mejor que te tomes un tiempo para pensarlo.
Maite Nicuesa