Año 2012, la mujer está en pleno apogeo, sabe lo que quiere y cómo lo quiere, se puede decir que hoy las mujeres no tenemos miedo a decir lo que deseamos y también a decir lo que no queremos de la vida.
Existen 3 hombres que provoca que escapemos de ellos. A continuación te presentamos a estos tres desafortunados. Aunque tienes la opción de amarlos, eso lo decides tú.

Ver: Mujer, protagonista y líder 

Hombre 1
MENTIROSO. Todo lo que dice es una mentira, está acostumbrado a fantasear, a mentir y a conquistar en base a engaños, unos más piadosos que otros. Aquí sus características:
Mentirosos compulsivos:
- Son aquellos hombres que encuentran excusa para todo y mienten sobre todo hasta el punto de perder la noción ellos mismos de la cantidad de mentiras que inventan.
- Nunca reconoce que miente porque él mismo se cree sus embustes.
Mentirosos piadosos:
- Son aquellos que mientes esporádicamente para salir de alguna situación incómoda. Alguna excusa para no querer salir, el que se hace negar cuando se lo llama o el que retrasa alguna respuesta.
Mentirosos  aparenta:
- Suele comentar sobre su coche último modelo, sobre sus viajes, acerca de su éxito con las mujeres o en los negocios cuando en realidad nada de esto es cierto. Su baja autoestima lo obliga a demostrar algo que no es.

Más allá de las claves para conocer un poco más qué clase de mentiroso se tiene al lado, hay que tener en cuenta sus gestos ya que éstos, a no ser que sea el mayor de los actores, lo delatan.
“La mirada suele decir lo que ellos no quieren que se sepa. Las mujeres debemos estar atentas hacia dónde dirigen la mirada cuando nos están hablando.

La experiencia indica que si se mira al suelo, se pestañea más de lo normal y si son diestros y miran hacia la derecha cuando hablan, es muy probable que no estén diciendo la verdad”.

“El mentiroso suele esconder sus manos en sus bolsillos, cruzar los brazos o esconderlos en su espalda y sus labios tienden a estar inmóviles, gesto inconsciente para evitar que salga la verdad al descubierto”

Hombre 2
INFIEL: El problema no es que le gusten las mujeres, el problema es que le gustan demasiado y no puede estar sólo con una, sólo les entrega, mentiras y sufrimiento, a todas.
Síntomas
1. Tiene cambios significativos en su comportamiento. Está más distante pero te dice que no le pasa nada si le preguntas.
2. Se muestra reacio o flojo a tener relaciones sexuales.
3. Movimientos extraños en sus cuentas o gastos que no puede justificar.
4. Se esconde para hablar por teléfono o le llegan mensajes al móvil que no lee delante de ti.
5. Evita las conversaciones sobre ustedes y sobre un futuro en común.
6. Lo has cogido en alguna mentira, ¿se contradice?.
7. Pasa muchas horas frente al computador, escribiendo mails o chateando y tiene mucho cuidado para que tú no veas lo que hace.
8. Ya no le gusta hacer planes juntos o salir de viaje. Te insiste en que hagas planes o viajes por tu cuenta con tus amigas.

Hombre 3
INMADURO: es un niño, no le gusta tomar decisiones, no busca a una mujer, busca a una madre, no le gusta trabajar, posee un arsenal de videojuegos, no se compromete, no se proyecta, es el eterno Peter Pan, prefiere a sus amigos en vez de estar contigo, no acepta sus errores, te culpabiliza de todo lo malo que le sucede, es estar con un niño, mimado.

Algo más para que lo identifiques. Los inmaduros son fácilmente reconocibles, sobre todo en la intimidad. Raramente hablan de sus sentimientos –más bien lo hacen de sus necesidades–, les seduce la juventud, o se obsesionan con ella, tienen un gran miedo a la soledad, y su inseguridad, casi siempre, los lleva a medirse secretamente con hipotéticos competidores que ni siquiera conoces. También dan por hecho que su pareja ha de saber todo lo que piensan, aun cuando nunca lo hayan verbalizado.

Son personas que se centran en recibir, pedir, incluso criticar, y en mucha menor medida, en dar. Por ello, si estás enamorada o tienes una relación pasajera con alguien así, no cometas el error de expresar tu furia cuando detectes que hace horas que no te tiene en cuenta para nada. Esto, aseguran los psicólogos, no soluciona el problema y hace que el inmaduro se encapriche aún más, castigándote de nuevo con su conducta de aislamiento. En lugar de enfadarte, ignórale y organiza tu vida alrededor de actividades que te beneficien a ti. Tu ausencia será un mensaje que él no podrá pasar por alto mucho tiempo.

“En definitiva, los hombres son un mal necesario, no se puede vivir con ellos, pero tampoco sin ellos…”
Siempre podemos elegir quien realmente merece lo mejor de nosotras, lo importante es que podamos entregar y recibir amor, pero cuando una relación se vuelve insoportable, donde priman más las peleas, discusiones, malos entendidos, hay dos opciones, la primera es hablar el tema y llegar a un mutuo acuerdo, y la otra es terminar la relación… Las mujeres queremos, comprensión, apoyo, pero sobre todo queremos entregar y recibir amor y el amor  es lo que rige al mundo. ¡Tú decides!