Miel: Mézclala con azúcar rubia y tendrás un espectacular exfoliante que dejará tu piel como la de un niño. La miel tiene un poder regenerador que sirve para acabar con las ojeras. Diluye una cucharada de miel en medio vaso de agua tibia. Empapa un algodón en esta solución, déjalo reposar sobre tus ojos por diez minutos y enjuaga con agua fría.
Naranja: Tiene altos niveles de Vitamina C, además de ser un excelente astringente para combatir la piel grasosa. Por sus propiedades antioxidantes, la naranja aporta luminosidad a tu piel y la desintoxica. Además cierra los poros y combate el acné.
Papa: Además de ser un alimento muy versátil, tiene propiedades anti inflamatorias, por lo que resulta perfecta para aplicarla sobre tu piel u ojos hinchados.
Leche: Ayuda a rejuvenecer, suavizar tu piel, además de darle firmeza, luminosidad y elasticidad.
Zanahoria: Debido a su color naranja, ayuda a prolongar el bronceado, además de tener altas propiedades antioxidantes, por lo que ayudan a protegerte del cáncer a la piel.
Sal de mar: Ideal para exfoliar tus pies, ya que contiene altos niveles de yodo. Enjuágalos con agua caliente y sal por veinte minutos.
Manzana: Ayuda a desmanchar la piel. Mézcla la pulpa de esta fruta con naranja y kiwi y lograrás estimular la renovación celular de tu cutis y tu piel quedará hidratada y firme. Es un excelente limpiador para tus dientes y acaba con las bacterias del mal aliento.
Palta: Su alto contenido grasoso es muy beneficioso para el cabello seco y para la piel sin hidratación.
Aceite de Oliva: Perfecta para reparar puntas partidas y fortalecer las pestañas antes de irte a dormir.
Yoghurt: Por sus minerales y vitaminas y proteínas, es muy buena para fabricar máscaras nutritivas para el rostro. Déjatelo por 10 minutos y sentirás tu cutis terso y humectado. Además, si estás quemada por el sol, puede ayudar a aliviar el dolor y las quemaduras.