• Es importante beber mucha agua. En la etapa de gestación es básico estar bien hidratada. Se tiene que tomar agua a lo largo del día, aunque no se tenga sed. No en muchas cantidades de golpe, pero si en pequeños sorbos durante todo el día.
  • Caminar a menudo. Durante el embarazo
    es importante hacer deporte, siempre de forma controlada y sin excesos de cansancio. Para evitar, también, las retenciones de líquidos un buen ejercicio es caminar. Si es posible, se recomienda andar durante una hora al día haciendo pequeñas paradas si es necesario, sobre todo, en los últimos meses. Es recomendable caminar una hora al día. Otros ejercicios que se recomiendan durante el embarazo son el yoga, el pilates y la natación.
  • Hay que tener muy en cuenta la dieta. Aunque parezca algo evidente, se tiene que vigilar mucho lo que se come y no caer a menudo en los antojos. Es posible que durante el embarazo se tenga más hambre de lo habitual y apetezca comida que no sea del todo saludable. El 40% de las embarazadas reconoce comer bollería industrial a menudo. Éste tipo de alimentos no son saludables para el bebé, sobre todo, si se hace un exceso de ellos.
  • Comer alimentos con hierro. Algunos pueden ser: hígado de cerdo, leche, cereales integrales, carnes rojas, legumbres y espinacas, entre otros. Lo que hace el hierro es hacer que te sientas con energía, por el contrario, si hay falta de hierro, se tendrá una sensación continua de cansancio y agotamiento.
  • Intentar evitar el ardor de estómago. Durante el embarazo es muy típico tener ardor de estómago, esto se debe al aumento de la progesterona, una hormona que acostumbra ha hacer una sobre producción de jugos gástricos. Una manera de evitarlo es tomando comidas flojas, es decir, intentar evitar al máximo todo tipo de salsas, picantes… es recomendable comer poquito y varias veces al día, con alimentos que sean fáciles de digerir. Para tomar cualquier medicamento se aconseja que siempre sea bajo suscripción médica, ya que no sabes como puede influir al feto.